El síndrome de las piernas inquietas (SPI) es exactamente como suena… desarrollas una necesidad de mover tus piernas para aliviar sensaciones molestas. Suele ser peor cuando te fuerzas por relajarte, es decir, cuando intentas dormir por la noche.
La mayoría de los pacientes con SPI también experimentan sacudidas involuntarias de las extremidades mientras duermen, lo que se conoce como movimiento periódico de las extremidades durante el sueño (PLMS en inglés). Veamos con más detalle seis signos y síntomas del SPI…
1. Sensaciones Incómodas
Las personas con SPI a menudo se ven impulsadas a sacudir o estirar las piernas para ayudar a aliviar sensaciones desagradables y a veces inusuales con las que quienes no tienen el problema no pueden relacionarse. El Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares dice que estas sensaciones “frecuentemente son difíciles de definir” pero pueden incluir dolor, palpitaciones, picazón, arrastrarse o “arrastrarse”.
La fuente señala que las mismas sensaciones pueden a veces afectar a los brazos y, en raras ocasiones, al pecho o a la cabeza. La gravedad de las sensaciones puede variar de un paciente a otro, desde las molestas hasta las directamente dolorosas.