2. Evite el crecimiento de moho
El lado reverso de esa moneda es un ambiente interior con excesiva humidificación, el cual es el suelo ideal para los ácaros del polvo y los alérgenos como el moho. Si es alérgico al moho, tome un descanso de su humidificador y si utiliza uno, asegúrese de limpiarlo regularmente para evitar que las bacterias se críen allí y las inhale al respirar.
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3. No fume en el interior
Los vapores fuertes y los químicos del humo de segunda mano definitivamente irritan las vías nasales y dejan los ojos rojos y los senos nasales secos — incluso si usted es el fumador. Hágale un favor a cada persona en su casa y fume afuera.
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4. Mantenga baja la temperatura
Si manipula su termostato en los meses de invierno, finalmente secará sus membranas nasales y causará problemas de sinusitis, como hemorragias nasales y congestión seca. Por el contrario, mantenga la temperatura en su hogar más fresca y más húmeda, para mantener así un ambiente cómodo, pero fresco. Solo póngase una cobija extra si tiene frío.
5. Destierre la caspa de las mascotas
Las alergias a la caspa de las mascotas pueden vivir en el aire, en sus alfombras, en los cojines del sofá y camas y solo le causarán más irritación sinusal. Si usted o alguien en su casa tiene alergia a la caspa de las mascotas, dele a su hogar una buena limpieza en invierno — que incluya las alfombras y los ductos, así como bañar a su perro o gato semanalmente para reducir la caspa.
6. Hidrate sus senos nasales
Si el aire en su hogar todavía está seco, trate de encontrar alivio para sus senos nasales con un spray de niebla salina. Estos funcionan de manera similar a los humidificadores; lubrican e hidratan su nariz y fosas nasales en ambientes secos. También puede utilizar una vasija neti pot y hacer una simple solución de agua salada (con agua tibia y una cucharadita de sal) en su casa.