En Activebeat, se habla mucho sobre los peligros de la presión arterial alta, o hipertensión. Sin embargo, no se le da la misma importancia a la presión arterial baja, o hipotensión. Si bien disminuir la presión arterial puede ser el objetivo de aquellas personas con riesgo de enfermedades cardíacas e infartos, la presión arterial baja puede indicar un problema de salud subyacente, como, por ejemplo, un problema cardíaco, una condición de la tiroides o un trastorno neurológico, y los primeros síntomas pueden ser mareos, náuseas y aterradores desmayos.
1. ¿Cuándo se considera que la presión arterial es baja?
La presión arterial (alta o baja), se refiere a la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de la arteria cuando el corazón bombea sangre. La lectura de la presión arterial depende de cada paciente. Por ejemplo, la baja presión arterial en atletas o en personas que hacen ejercicio de forma regular, puede ser un indicador de una salud excelente. La clínica Mayo estipula que existe hipotensión (o baja presión arterial) cuando la lectura de la presión arterial sistólica (cuando el corazón se contrae) es de 90 mm Hg (milímetros de mercurio) o menos, y cuando la presión arterial diastólica (cuando el corazón se relaja) es de 60 mm Hg o menos. En otras palabras, menos de 90 (valor máximo) y menos de 60 (valor mínimo) en la lectura de la presión arterial (“90/60”, como se dice comúnmente). Sin embargo, la presión arterial baja solo es alarmante si está acompañada de otros síntomas (i.e., mareos o desmayos).