Tu sistema periférico neuronal consiste de un sistema de nervios que conecta al cerebro y a la espina dorsal con los músculos, la piel y los órganos internos. Su función es vital, ya que envía información de tu cerebro y tu sistema nervioso, al resto de tu cuerpo. Si estos nervios sufren algún daño o desarrollan una condición, puedes desarrollar un desorden llamado neopatía periférica.
La neopatía periférica puede impactar el movimiento muscular, afectar la sensibilidad de tus brazos y piernas, e incluso puede causar dolor. Un diágnostico temprano es esencial para tratar los síntomas y prevenir futuros daños a otros nervios periféricos. Es por ello que reconocer los primeros signos es importante para tratar los síntomas y recuerrir al tratamiento para neuropatía periférica.
¿Qué es la Neuropatía Periférica?
La neuropatía periférica es un desorden que ocurre cuando tus nervios dejan de trabajar de forma óptima debido a un daño, o porque se han destruído completamente. Cuando esto ocurre, tus nervios no funcionan como deberían. Esto puede resultar en una falsa señal del dolor cuando realmente no existe nada que te esté causando dolor.
En contraste, puede que tus nervios no envíen ninguna señal de dolor, incluso cuando algo te está haciendo daño. Sin duda la neuropatía periférica es muy incómoda, sin embargo, existen tratamientos disponibles que pueden ser de mucha ayuda.