¡Los ataques de la vesícula biliar son francamente aterradores! A menudo se los confunde con un ataque al corazón, pues cuando la vesícula biliar no es saludable, este pequeño órgano digestivo es incapaz de ayudar adecuadamente al proceso digestivo (al almacenar la bilis del hígado y excretarla al intestino para la digestión de alimentos). Como resultado, los cálculos biliares pueden bloquear los conductos biliares, la bilis puede almacenarse en la vesícula biliar y puede causar una inflamación dolorosa o la vesícula biliar puede infectarse debido a una enfermedad conocida como colecistitis.
Un ataque a la vesícula biliar puede surgir repentinamente y durar entre unos minutos a unas pocas horas y hasta requerirá hospitalización. Es por ello que mantener la calma y reconocer los signos puede ser importante para su salud y para ser capaz de soportar el ataque.
Veamos los 20 signos y síntomas de advertencia de un ataque de la vesícula biliar…
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1. Dolor de vientre
La vesícula biliar es un pequeño saco, o compartimento de almacenamiento, para la bilis, que es producida por el hígado. La vesícula biliar envía la bilis hacia el intestino delgado a través de un conducto denominado conducto cístico. Todo este proceso tiene por objeto descomponer los alimentos (en concreto, los alimentos grasos). Normalmente no se presta demasiada atención a la vesícula biliar, a no ser que el flujo de bilis disminuya o se bloquee, lo que puede ser muy doloroso.
Uno de los síntomas más comunes y evidentes de los cálculos biliares es el dolor que comienza en la parte superior derecha del estómago, bajo las costillas. Este dolor de vientre se irradia hacia fuera, desplazándose gradualmente hacia el centro del vientre o la parte superior de la espalda. Los ataques de cálculos biliares acompañados de dolor de esta naturaleza suelen durar 15 minutos, pero muchos pacientes afirman que el dolor continuo o persistente puede durar horas e, incluso, despertarlos del sueño.