Todos hemos estado en esa situación: salimos de la cama a rastras luego de pasar una noche casi sin dormir y ¡confirmamos que nuestra imagen es el reflejo de cómo nos sentimos en realidad! Las ojeras, si bien tienen una apariencia alarmante, no son una casusa de preocupación médica. La falta de sueño es la razón principal de que aparezcan, pero hay muchos otros motivos. Las ojeras pueden ser un indicador de costumbres poco sanas, de causas hereditarias, o bien de que el cuerpo tiene alguna deficiencia.
Alergias
Las alergias pueden pasarle factura a nuestro cuerpo —desde estornudos y ojos llorosos, a picazón en la garganta y sinusitis—. La congestión nasal también es un síntoma común de las alergias estacionales y podría estar contribuyendo a la aparición de ojeras.
Según WebMD, “la congestión nasal puede llevar a la inflamación de los vasos sanguíneos cerca de los ojos y de la nariz, y hacer que la piel se vea más oscura”. Tener picazón o frotarse los ojos, también puede destacar la decoloración. La fuente agrega que las ojeras pueden aparecer especialmente prominentes durante la temporada de la fiebre del heno.