La diabetes es una enfermedad que padecen muchos estadounidenses. De hecho, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, más de 100 millones de adultos en los EE. UU. tienen diabetes o prediabetes (que puede conducir a la diabetes si no se trata). El reporte dice que para 2015, la escalofriante cifra de 9.4 por ciento de la población del país era diabética.
Este informe se centra principalmente en la diabetes tipo 2, que comúnmente se conoce como diabetes del adulto y está ligada al estilo de vida y la dieta (entre otros factores de riesgo). Sin embargo, también se analiza el tipo 1, el cual afecta a los pacientes desde una edad típicamente más temprana. Echemos un vistazo más de cerca para separar las diferencias entre estos dos tipos…
Acerca del tipo 1
La Clínica Mayo dice que esta forma de diabetes alguna vez se conoció como diabetes juvenil debido a su causa principal: el páncreas no produce suficientes hormonas que regulen la cantidad de glucosa en la sangre.
Esta es una enfermedad crónica que también puede desarrollarse más adelante en la vida y no está directamente relacionada con factores dietéticos o de estilo de vida como lo está la diabetes tipo 2, agrega la fuente. Sin embargo, el tratamiento puede implicar controlar el estilo de vida para minimizar sus efectos.