Skip to main content

Siete GRANDES mitos sobre las grasas que deberíamos ignorar

min read

By ActiveBeat Español

Las grasas tienen muy mala reputación. Es probable que a esta altura sepa que existen distintas categorías de grasa— las buenas y las malas, las saturadas y las no saturadas y las trans versus las monoinsaturadas. En realidad, las grasas han ganado popularidad después de que los expertos en salud comunicaran las bondades de los aguacates y el aceite de coco. No obstante, con este criterio, muchos se han ido al otro extremo y han creado una ola de ENORMES mitos que nos vemos obligados a desmentir.

Veamos qué hay detrás de tantas mentiras vinculadas con incorporar grasas a su dieta…

1. Contrólese — hasta con las grasas saludables

Tanta información sobre las bondades del aceite de oliva puede derivar en un hábito dañino. Sí, es cierto que este aceite aporta un tipo de grasa monoinsaturada muy beneficioso para la salud cardiovascular. No obstante, consumirlo en exceso provoca aumento de peso.

Al fin de cuentas, el viejo principio de la moderación sigue siendo clave. Por ejemplo, al organismo le hace falta una buena variedad de fuentes de grasas saludables para proteger el corazón, la piel y el cabello y para prevenir enfermedades— en esa variedad se incluyen ácidos grasos esenciales de alimentos como pescados, frutos secos y semillas, aguacates y aceites naturales como el de oliva. Por otro lado, las grasas trans (presentes en las frituras y en los productos procesados) son los principales enemigos del corazón.

good fat

2. Colesterol en los alimentos versus colesterol en sangre

La idea de que consumir alimentos ricos en colesterol eleva los niveles de colesterol en sangre tiene bastante sentido. Sin embargo, según una investigación del Comité de Asesoramiento de los Dietary Guidelines de los Estados Unidos, el colesterol no funciona de esa manera.

De hecho, este organismo afirma que el colesterol de los alimentos tiene muy poca conexión con el que circula en nuestra sangre, ya que este último se fabrica en el hígado.

Cholesterol

3. Huevos: ¿sí o no?

Huevos…¿sí o no? Muchos asumen que las yemas son las que elevan los niveles de colesterol en sangre, debido a que son la parte que más colesterol tiene. Sin embargo, ese es sólo un mito que deberíamos ignorar.

Si ha dejado de consumir huevos porque cree que aumentan sus niveles de colesterol en sangre, tómese en serio los consejos del Comité de Asesoramiento de los Dietary Guidelines de los Estados Unidos . Este organismo asegura que los huevos son “una gran fuente de proteínas” que contiene colina (en especial la yema), un neurotransmisor muy poderoso para el cerebro, que se desaprovecha si sólo come las claras.

eggs

4. Grasa = engordar

Muchos sabemos lo suficiente sobre nutrición como para entender que no todas las grasas se elaboran de la misma manera. Las hay buenas y malas, lo que significa que comer grasas no necesariamente lo hará subir de peso. De hecho, una dieta que incorpora grasas saludables puede ayudarlo a adelgazar.

Según Michelle Babb, dietóloga registrada y autora del libro Anti-Inflammatory Eating Made Easy, a pesar de que la grasa contenga más calorías por gramo que las proteínas y los carbohidratos— incluir las de tipo saludable en un plan alimenticio equilibrado promueve la producción de hormonas de saciedad, que lo harán sentir más satisfecho después de cada comida y evitará que recurra a bocadillos hipercalóricos para aplacar sus antojos.

tummy fat

5. ¿Moriré por comer carnes rojas?

Como sucede con las grasas, muchos suelen demonizar las carnes rojas. Sin embargo, no todas las carnes se elaboran de la misma manera. Por ejemplo, los científicos de la Universidad de Varsovia, en Polonia, afirman que existen muchísimas diferencias entre las carnes rojas procesadas y los cortes no procesados.

Por ejemplo, los investigadores señalan que las dietas ricas en carnes rojas procesadas— como las salchichas, la panceta y los embutidos, como el jamón y el salame— duplican los riesgos de sufrir un ataque al corazón. Mientras que otros estudios demuestran que aquellos que consumen cantidades moderadas de carnes rojas no procesadas (como hamburguesas y filetes magros) no ponen en riesgo su salud cardiovascular.

steak

6. Con un poquito de manteca o mantequilla basta…

Según el American Journal of Clinical Nutrition, untar un poco de manteca o mantequilla en su tostada de pan integral no tiene por qué boicotear sus intentos por llevar una alimentación sana. Este organismo afirma que un poco de mantequilla no le hace daño a nadie.

Sin embargo, los mismos expertos explican que las cantidades son clave. Por ejemplo, ponerle manteca a su tostada de desayuno no le hará nada pero si la incorpora a todas sus recetas, subirá de peso y se volverá propenso a sufrir todo tipo de enfermedades crónicas.

Butter

7. Modérese con las grasas saturadas

Durante décadas, los expertos han coincidido en que incorporar demasiadas grasas saturadas a su dieta tapará sus arterias y le provocará un ataque cardiaco. Sin embargo, ciertas investigaciones recientes, incluido un estudio notable de la revista científica Annals of Internal Medicine, no han logrado conseguir pruebas suficientes de que las grasas saturadas eleven los riesgos de sufrir problemas de corazón.

Esto no significa que las grasas saturadas deban considerarse un alimento saludable. Al contrario, como todo lo demás, la moderación es clave a la hora de medir las cantidades de queso, manteca y carnes rojas que incorpora a su dieta.

couple eating cheese

ActiveBeat Español

Contributor

Activebeat se dedica a informar a los lectores de todas las noticias y acontecimientos importantes del mundo de la salud. Cubrimos cada aspecto de las noticias sobre la salud, desde consejos y epidemias hasta fitness, nutrición y estudios.

Fitness & Nutrición